El protagonista de esta novela es un solitario empedernido. Cuando Selín, una chica que conoce en la biblioteca donde trabaja, lo invita a su fiesta de cumpleaños, no encuentra excusa para negarse. Esa noche toma resignadamente el ómnibus que lo lleva hasta la dirección que figura en la tarjeta. Pronto descubre que es el primero en llegar. Incómodo y desconcertado, entabla con su anfitriona un diálogo que llene el vacío de la espera. Pero ésta se prolonga más de lo razonable y, horas más tarde, deriva en una serie disparatada de acontecimientos, que incluirá un fin de fiesta catastrófico, un accidentado viaje en auto, un episodio policial y la visita de Selín a su departamento, con la irrupción espectacular de las muñecas sexuales.