La novela está escrita con un estilo ágil, en capítulos cortos que facilitan la lectura, y con excelentes descripciones de los lugares, el entorno, los pueblos, el clima, el viento, el frío, la playa, el río, los arrozales... descritos de forma que puedes imaginarlos y casi sentirlos. La novela te mantiene constantemente en suspenso desde el desarrollo de la trama hasta su desenlace. El personaje principal, Nico, muy bien encarnado, es un joven detective que intenta resolver la desaparición, pero entre medias hay muchas subtramas que complican toda la investigación, mezclando misterio, acción e investigación que te harán devorar el libro. Un final con buen ritmo y posiblemente una nueva aventura con Nico. Los autores han creado una trama atractiva que se desarrolla con cambios frecuentes e imprevisibles. Me mantuvo en suspenso y me permitió terminar el libro muy rápidamente. Lo he disfrutado y lo recomiendo.
hace 2 años