Un grave accidente de coche o quién sabe si un intento de suicidio precipita a Leonor Bruler a una cama de hospital en la que se intentará recuperar de sus lesiones; la más grave, la pérdida de memoria. El camino por recorrer enfrenta a Leonor con dos escenarios contradictorios: el de una familia que parece ejemplar y el de una gran profesional muy reconocida en el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), lugar en el que investiga y trabaja. Sin embargo, la realidad la sitúa en un ambiente de marginalidad y sordidez donde los "excesos" forman parte de una segunda identidad que la aparta de la "foto fija" de madre de familia y profesional ejemplar. Poco a poco su memoria va volviendo de forma inconexa. Son esos fogonazos de claridad los que la precipitarán a una realidad llena de chantajes y sucias contraprestaciones pues en la vida de Leonor nada es lo que parece…