Una obra que evoca las relaciones maestro-discípulo que han marcado la cultura universal: Sócrates y Platón, Jesús y sus apóstoles, Virgilio y Dante o Husserl y Heidegger son algunos de los casos ejemplares que sirven a Steiner para analizar los elementos clave del nexo profesor-alumno: el poder del maestro para aprovechar la dependencia y vulnerabilidad del discípulo; la complementaria amenaza de subversión y traición al mentor por parte de este, y el recíproco intercambio de confianza y amor, de aprendizaje y enseñanza entre profesor y alumno.