Quizá lo más fascinante de la ciencia no sean los misterios que consigue develar, sino los nuevos enigmas que surgen a partir de sus respuestas, de tal suerte que el quehacer científico es en realidad un continuo descubrimiento de nuevos campos de conocimiento. Esta nueva compilación complementa el universo de temas que se abordaron en el primer volumen: entre anécdotas históricas, las reflexiones sobre descubrimientos tecnológicos o científicos, o las opiniones sobre algún tema del momento, hallamos hermanadas dos vocaciones: el arte y la ciencia.