Tomando como pretexto una gira realizada con su grupo The Bad Seeds por veintidós ciudades de Norteamérica, Nick Cave ha creado un libro de impresiones, recuerdos, poemas, letras de canciones, reflexiones sobre su filosofía de la composición, y también sobre sus temores y miedos más profundos, volcados de manera artística con una sensibilidad y una imaginación desbordadas, no carentes de humor. A través de una escritura tan lírica como íntima, Nick Cave se desdobla de manera continua entre sus respectivos roles como creador e intérprete, pues, como él mismo dice, es «un sistema nervioso que se alimenta de rimas y fantasmas». Entre aviones, autocares, hoteles y conciertos, La canción de la bolsa para el mareo es el testimonio alucinado de un viaje espiritual y sonoro por las distintas estaciones que componen ese fascinante enigma conocido como Nick Cave, que afirma con precisa lucidez: «La bolsa para el mareo es una canción de amor larga y a cámara lenta».