Resumen

Amar, luchar, trabajar, morir, todo es motivo de poesía para Mario Benedetti. Cada pequeña situación del vivir cotidiano merece una canción, una celebración a la constante sorpresa de existir. Para Benedetti, la poesía no tiene sentido si no se comparte, si no se reproduce, si no fecunda. El poeta se convierte en nuestra propia voz cuando el amante, el revolucionario, el oficinista, se reconocen en él, uniéndose en el ritmo de celebración a la vida. En inventario I, se reúnen los poemas publicados de 1950 a 1985, testimonios de la propia existencia del autor.