Buen planteamiento y buen ritmo al principio, con una buena descripción de Brooklyn y del ambiente de la delincuencia de poca monta de la época. Los personajes sorprenden, sobre todo la extraña familia que se forma alrededor de Frank Minna y sus huérfanos. Sin embargo, según avanza el libro, se estanca la acción y se pierde la sorpresa. Sobran los paseos detallados de un lado a otro, sin ningún sentido, y se llega al final de una forma bastante forzada y abrupta. Tenía esperanzas, pero se me queda bastante corta.
hace 5 años