De Pulgarcito a Mazinger Z pasando por Pinocho, Scooby-Doo, Pippi Langstrump... Los personajes de nuestra infancia nos mostraron el valor del altruismo y el significado de la bondad, nos enseñaron a perder y también a ganar, nos ayudaron a entender el mundo de una forma mágica y creativa. Ahora, en el mundo de la técnica y la razón, cuando el lenguaje de los resultados invade todos los ámbitos, incluida la educación, Gabriel García de Oro nos invita a recuperar aquellas historias que resuenan en nuestro interior para que reconectemos con el poder transformador de la ficción. Alí Babá, o la ardua tarea de prosperar, Astérix y Obélix o la cualidad de la tenacidad, Charlie Brown o la lección del eterno perdedor, Alicia o esa tendencia nuestra a meter la pata, Cenicienta o el poder de la perseverancia... Este recorrido por el mundo fantástico que forjó, nuestra infancia extrae las perlas de sabiduría necesarias para que aquellas espadas, lámparas y varitas nos devuelvan su magia.