Emmanuelle es la jovencísima esposa de un ingeniero, Jean, que por motivos de trabajo se ha desplazado a Tailandia. Emmanuelle, todavía en París, espera reunirse en breve con Jean. Sin embargo, ya en el avión que la transporta a Bangkok, siente que atrae poderosamente a los hombres. Y a ella eso le gusta. Sus escarceos en pleno vuelo no son más que un prólogo de lo que le espera en el exótico país al que se dirige. Una vez allí, es presentada a la colonia de europeos que residen en Bangkok: un mundo refi nado, muy selecto y restringido, y entregado al disfrute de todos los sentidos. Todos. Muy pronto, la condesa Ariane de Saynes, la pequeña Bee, Marie-Anne y otros miembros de la exquisita sociedad que la rodea insisten en que Emmanuelle conozca a Mario, un noble italiano al que, según le comentan, le gustan más los hombres que las mujeres. Sin embargo, Mario se convierte en un maestro para Emmanuelle, y la iniciará en las artes amatorias, en las reglas amorosas, y también en una fi losofía del eros vitalista y liberada de tabúes.