En la ciudad de Arcila, se intercepta una misteriosa carta en poder del rebelde Guennun. Su contenido, aparentemente inocente, detalla el estado de salud del califa e insinúa la existencia de un espía en la corte de al-Hakan II. El eunuco Faiq al-Nizami lo comunica de inmediato al primer ministro y, ambos, deciden abrir una investigación. Faiq exige que el encargado de la investigación sea un hombre ajeno al espionaje y, al mismo tiempo, con facilidad de movimiento y discreción. El elegido es el eunuco Yasir, gran oficial de la biblioteca. Al poco tiempo, en el Zoo de Medina al-Zahra, aparece un cadáver en la jaula de los leones y varios esclavos del palacio mueren envenenados. Las sospechas crecen. El destino del califa al-Hakan II y el de toda su familia ya está escrito. El califato de Córdoba está por desaparecer y comienzan a surgir los Reinos de Taifas.