Una historia entretenida, con cierto misterio sobre asesinatos acaecidos en un monasterio japonés en el siglo XIX, un samurái que hace de detective y una misteriosa geisha. Lo que más me ha atraido es la descripción de la vida de las geishas en aquella época, que recuerda al libro "Memorias de una geisha". Siempre queda la eterna incógnita de pensar si en realidad eran o siguen siendo artistas o prostitutas, usando como telón de fondo paisajes espectaculares, místicos como el monasterio de Nikko y exóticos (Monte Fuji, Oyama, Hotaka,..). Un espléndido viaje más a través de la escritura...recomendable.
hace 8 años