La acción transcurre en un futuro indefinido e imperfecto, donde el encierro domiciliario, cubrirse el rostro con velos o comunicarse mediante pantallas son parte de la normalidad vigente. Dieciocho escritoras a bordo del navío El Mañana son secuestradas por un grupo comando, privadas de sus experiencias y de sus palabras: borradas en un instante del universo literario. ¿Por qué es tan importante silenciarlas? ¿Hay un lenguaje exclusivo de ellas? ¿A qué le temen los que están en el poder? Los agentes del orden han destruido toda la obra de Elisa Algarañaz, la han arrancado de su biblioteca y la han confinado a una habitación, sola con su computadora portátil, la cual revisan semanalmente para luego borrar todo su contenido. En ese contexto, ella intentará responder a sus preguntas y junto a Esteban Clemente y Omar Katvani –un hacker y un traductor–, se embarcará en una historia de amor, delirio, conspiraciones y peligros cuyo puerto puede ser una respuesta imposible.