No había leído a Onetti hasta ahora y me he encontrado a otro maestro en el dominio de las palabras, como lo suelen ser los autores del boom latinoamericano. En la novela se respira en todo momento, un ambiente de derrota y desencanto, de decadencia de los cuerpos, las almas y las cosas. Algo de todo esto se me debe de haber contagiado porque me he desanimado y junto a que el argumento no es muy atractivo, pues me he aburrido algo y se me ha hecho una lectura pesada. Sin duda es una novela compleja y de evidente calidad literaria pero no ha llegado a entusiasmarme.
hace 6 años