Un libro sobre el estado de desorientación y de alerta constante de un fotógrafo desubicado en un lugar desconocido, Ciudad de Guatemala, en el que el autor vivió durante veintiocho días. Muestra el paso de los días inmerso en situaciones incontrolables, evocando paisajes y espacios aparentemente comunes. El factor humano como ingrediente reiterativo, siendo parte de imágenes directas de un autor incapaz de tomar distancia entre lo objetivo y lo emocional.