C. L. Taylor, escritora inglesa que debutó en 2015 con Los confines del silencio, vuelve con este nuevo thriller psicológico que no hace más que afianzar su más que ganado apodo de "La reina del thriller".
Desaparecido nos sumerge en la peor y más desgarradora situación que puede darse para unos padres: la desaparición de su hijo.
No son escasos los días en los que nos levantamos y escuchamos o leemos noticias de esta índole. La incertidumbre, la desesperación del avance de los días sin resultado alguno, el sumergirse en el ritmo de la vida y percatarse de que este continúa inmutable sin importarle apenas lo ocurrido... son factores que conducen al agotamiento físico y mental por parte de los padres quienes, marchitándose por dentro, pasarán las horas sentados encima de la cama de aquel niño que les mira a través de esa foto enmarcada y cuyas risas hace tiempo que no reverberan por las paredes de una casa silenciosa.
La autora no se anda con miramientos ya desde la primera página, situándonos en medio del circo mediático que se ha originado a raíz de la desaparición de Billy, el hijo de Claire, la protagonista. Los interrogantes aumentan en cada página, acompañados en todo momento de una narración amena y unos diálogos fluidos, lo que ayuda a que la mente del lector imagine, y no divague. Los protagonistas son como cebollas, ocultos todos bajo varias capas a la espera de que se desvelen todos los secretos que esconden y el grado de implicación en los hechos que están teniendo lugar. Toda la información que ansiamos conocer nos es ofrecida en pequeñas dosis, como piezas de un puzzle que poco a poco deberemos unir, comprobando al final si el resultado es el que esperábamos. De una forma u otra, el halo de misterio alrededor de Billy no dejará a nadie indiferente. Más bien hará a más de un lector despotricar por no haberse acercado ni por asomo a lo que él, con total seguridad, creía que era la respuesta.
Algunos pensarán que la muerte es peor que una desaparición. Pero nada más lejos de la verdad. Con una muerte puede quedar la pregunta "¿quién lo hizo?". Sin embargo, con una desaparición, aparte del "¿quién lo hizo?", siempre se antepondrá el "¿dónde estará?", y esta última cuestión es la que más hunde su filo en el corazón. Acompaña a Claire en este viaje para responder a estos insidiosos interrogantes y descubrir que no puedes confiar en nadie, querido lector. Ni en tu familia, ni en tus amigos.... ni siquiera en ti mismo. (David Carrasco, 29 de mayo de 2017)