«Daniel Matamala ha escrito una crónica exhaustiva y sorprendente. Nadie ha narrado el Mundial del 62 con tanta atmósfera, y el resultado pareciera despejar de una vez y para siempre todos los mitos que generaciones de chilenos hemos alimentado sobre un acontecimiento que marcó y a la vez fue el reflejo de una época. Matamala no solo ejerce su juicio crítico sobre el desempeño deportivo de las estrellas de entonces, sino que habla con agilidad y firmeza sobre las polémicas del día, las intrigas, alegrías y decepciones que conforman la historia de un torneo que, bueno o malo, será para siempre nuestro Mundial.