Una familia venida a menos (1874) arranca con un párrafo memorable que hace presumir lo mejor y temer lo peor: «Nuestra familia es una de las más antiguas de toda Rusia. Todos los Protozánov somos descendientes por línea directa de los primeros príncipes que gozaron de poder en estas tierras y en nuestro escudo familiar consta que nuestros títulos de nobleza nos pertenecen por herencia y no “por acta notarial”. No hay narración sobre la historia de la antigua Rusia donde no aflore aquí o allá el nombre de alguno de nuestros antepasados». Leskov cuenta la historia de una familia noble, la de los Protozánov, que es al mismo tiempo novela y memoria familiar, un recorrido por la Rusia del siglo XIX, en el que el autor nos deslumbra por su profundo conocimiento de la mentalidad popular de su país y por su capacidad de compasión por los fracasados. Leskov se distingue por la fluidez oral de su lenguaje, que aquí Jorge Ferrer ha sabido trasladar magníficamente al castellano. Se trata de una obra de Leskov escasamente traducida, existen versiones italiana y francesa, pero es un título absolutamente inédito en español.