Luces y sombras en esta novela, la primera que leo del autor. Por un lado, me gustó el estilo ágil y con toques de humor de algunas partes, pero por otro lado a veces se hace muy denso y repetitivo. Además, ese estilo que destaca en según qué escenas, en otras se vuelve confuso (tuve el arrebato de dejarlo en la primera página porque no me enteraba de nada con tanta fase subordinada y paréntesis). La historia en sí es interesante y da en el clavo en muchos aspectos del mundo gay, o la relación de los protagonistas cuando uno espera más del otro. No obstante, el tono maniqueista se deja notar en varias ocasiones, el prota muestra un sentimiento de superioridad que no se sabe si es intencionado o ramalazos del autor, y ya si nos metemos en política...
hace 5 años