William Blake, más conocido como poeta que como prosista, nos presenta en Una isla en la luna una sátira con juegos de palabras y burlas con dobles sentidos, que gracias a la traducción de Cátedra podemos apreciar debidamente. No es, obviamente, un texto fácil, y detenerse ante cada frase nos hace apreciar esa faceta de "cínico" que adopta el escritor al describirse a sí mismo entre sus amigos. La obra nos muestra una curiosa visión de la vida del poeta y de su círculo de amistades que sin duda es reveladora de toda una época aunque algo pesada a ratos si no estamos acostumbrados a las constantes referencias literarias. En cualquier caso, para los interesados de Blake, se trata de una obra clave, fundamental para el estudio del autor. (Elsa Veiga, 5 de octubre de 2015)
hace 9 años