Estos relatos muestran la historia desde un punto de vista interesante y popular. Es curioso porque muestra la subjetividad del autor desde las fuentes con las que se ha trabajado y los recuerdos.
hace 9 añosEstas puñaladas vienen a ser como los impulsos con los que abrimos los émbolos obturadores de esas fuentes callejeras que, tras verter una cantidad limitada de agua, se cierran obligando a repetir la presión para seguir obteniendo el líquido que de ellas mana. En nuestras fuentes, de cuerdos, de locos, de distraídos…, a cada presión aparece una historia que es fruto de la imaginación del autor. Pero al igual que el agua que aquellas vierten lleva incorporados los sabores de las tierras por donde ha transcurrido hasta aflorar por los manantiales, estas historias arrastran el aroma de lo rozado en el tortuoso camino entre el cerebro y la pluma. Son dichos populares, sucesos e historietas de dominio más o menos público que el lector reconocerá a pesar de no haber sido reseñados convenientemente, como lo han sido las referencias a las jotas y, de forma clara, a los cuplés. «Estas contaminaciones, irremisiblemente incorporadas ante la espontaneidad y el sentido de la oportunidad con la que se han presentado, pudieran parecer fuera de lugar, por lo que solicito del lector su comprensión, justificación y, en su caso, el perdón», dice el autor.
Estos relatos muestran la historia desde un punto de vista interesante y popular. Es curioso porque muestra la subjetividad del autor desde las fuentes con las que se ha trabajado y los recuerdos.
hace 9 años