Un libro difícil (y con mucha miga entre sus líneas), de un trema y de un tiempo difícil (y con mucha miga entre sus habitantes), años 70 en Belfas, Irlanda del Norte del Reino Unido, Belfas, aunque no lo nombra la autora, tampoco nombre de calles, barrios, ni personas, ni grupos terroristas por su nombre. Pero pronto te acostumbras a la nomenclatura: primera hermana, tercer cuñado, medio novio, paramilitares, renegantes, fulano de tal, el chico nuclear, el verdadero lechero, hermana del medio (que es la que narradora del libro), ejercito… son algunos ejemplos. Esta narradora (la hermana del medio) es una mujer de dieciocho años que vive en uno de los barrios católicos en una gran ciudad de Irlanda del Norte. Su mayor pecado es que no quiere saber nada de política, ni de los comadreos y chismes que se le endosa a cada uno en cuanto se descuida. Por lo que ella habla poco, solo dice “no lo sé” a lo que le preguntan, pero entonces se le acusa de ser altiva, y sobre todo de «LEE MIENTRAS ANDA» Es la historia de muchos acosos: por el primer cuñado, por el medio novio, por la hermana mayor, por la comunidad que la presiona y vigilancia siempre, por la madre, por el tercer cuñado, por la mejor amiga de siempre y el ACOSO más importante, el de Milkman, un miembro de alto rango, ejem ejem.., por lo que al elegirla a ella, se hace intocable para los demás, pero a la vez criticada, a pesar de que ella no ha dado consentimiento, ni le ha dirigido la palabra. Su acoso no lo puede decir, ya que no la ha tocado. Me encantó Milkman , pero me sería difícil recomendárselo a alguien que no salga de ella leerlo.
hace 1 mes