Me pareció muy repetitivo y largo. La idea es interesante, pero creo que le sobran páginas. Sentí que leía lo mismo una y otra vez... mas allá de que al tratarse de un soliloquio, puede haber repeticiones, propias del habla, me resultó pesado y aburrido. Leí otros libros del autos, como Guerra civil, Papá y Las madres no le decimos esas cosas a las hijas, que me encantaron, pero este no fue el caso.
hace 6 años