Gracias Don Gonzalo Hidalgo Bayal por haber escrito el libro perfecto para ser leído en este preciso momento y en este lugar por este que soy. Mi única queja hasta el momento es que el libro sea tan breve y que deba tener un final, lo cual me obliga constantemente a detener la lectura y a releer párrafos completos decenas de veces. Algunos libros, como quizá también algunos momentos de nuestra vida, deberían ser eternos.
hace 5 años