Sofía es una treintañera que no atraviesa su mejor momento. Recién divorciada y en el paro, decide mudarse a casa de su abuela Julia para cuidarla y, de paso, ahorrarse el alquiler que no puede pagar. Lo que al principio es una solución desesperada se convierte pronto en una especial relación de convivencia entre una anciana cada vez más enferma, que desea narrar su vida antes de que se le acabe el tiempo, y una nieta que, página tras página, irá dándose cuenta de cómo necesita escuchar ese relato. Las extraordinarias vivencias de la abuela durante la Guerra Civil, cuando arriesgó su vida como parte de un grupo de resistencia mientras el hombre al que amaba estaba preso, se unen en esta novela al reflejo -lleno de ternura y tristeza, pero también de humor- de la rutina de estas dos mujeres que comparten unos días que saben que serán los últimos. Basándose en la historia de su propia familia, la autora trenza una novela que salta una y otra vez de la actualidad al pasado, para contarnos dos historias que tal vez hayan sido siempre una sola.