Es la segunda novela que leo de Luis Landero y, como la primera, el resultado final ha sido excepcional. Una obra que me ha embelesado de principio a fin, compuesta de capítulos que más bien parecen relatos cortos de una vida intensa: la del autor. Un retrato de su infancia y juventud, sus pasiones literarias, todo ello aderezado por una prosa exquisita. Hay capítulos que son maravillosos. Me fascina la sencillez de la obra de Luis Landero y al mismo tiempo la profundidad que emana de la misma. El autor ha ganado a un incondicional.

No voy a poner en duda la calidad literaria del autor , pero este es un libro demasiado "personal" y ocurre lo mismo que cuando un compositor afirma que es su disco más "personal"...... es un COÑAZO, y eso es lo que es este libro

Pocos libros tan breves se me han hecho tan largos

Me gustó más El balcón en invierno, pero este también es un buen libro.

Un libro para releer y releer y descubrir en cada nueva relectura algo nuevo, como un episodio de los Simpons. ¡De 10!

Precioso libro en el que hace un resumen de su vida, con una prosa magistral, como todo lo que he leído de Landero. Esa cercanía con la que nos acerca a su tierra y sus sentimientos nos los hace vivir de forma sencilla a la vez que profunda. Recomendable sin duda

Libro de relatos, recuerdos, digresiones. No todos me han gustado igual, hay algunos muy curiosos. Pero la prosa de Landero es tan poderosa que te acaban atrapando. Recomendable, sin duda.

El autor evoca su niñez, nunca perdida para el en diferentes ocasiones de su vida, con sus familiarea, en su pueblo, etc. Un buen libro de Luis Landero sobre el paso del tiempo y las cosas curiosas de las que nos acordamos.