La acción de la obra tiene por marco un castillo en los confines de la Champagne y la Borgoña; las pequeñas ciudades turbulentas de Francia; las aldeas y los campos; y, también, Tierra Santa y sus riberas poco hospitalarias, Jerusalén, el Santo Sepulcro. La intriga se desarrolla enteramente a lo largo de la vida conyugal de la hermosa Aalais y de Ansiau, barón de Linnières: su amor, su separación, los numerosos hijos que les proporcionan alegría y preocupaciones a la vez, su senectud y su muerte.