Aunque novelada, la historia de Jozef Sors, en realidad Ivan Sors, no es la de un simple pintor eslovaco, es una forma de percibir y de entender la realidad de la manera más humana en una Europa convulsa y crispada, una Europa salvada de la ruina moral por corazones puros y almas buenas como las que Sors encuentra. Preciosa prosa la de Alfonso Cruz, preciosa novela donde la pureza puede acariciarse con la yema de los dedos.
hace 7 años