El joven y seductor Nick Brink se cita con su novio Clay Guillory en Venecia después de dejar atrás una vida insatisfactoria en Nueva York. En tan bello como decadente escenario pretenden llevar a cabo una única estafa que debería solucionarles la existencia después de poner tierra de por medio. Tan solo tienen que venderle una colección de antigüedades falsificadas a un pomposo millonario que disfruta de su jubilación en un imponente palazzo veneciano. El plan urdido por Clay es sencillo en apariencia, aunque ponerlo en práctica requerirá mantenerse alerta ante cualquier imprevisto y no incurrir en el mínimo error. Pero no siempre las víctimas son tan incautas como imaginamos, ni los guiones se cumplen a rajatabla, ni la avaricia se puede mantener a raya.