Son muchas las mujeres que tienen dificultades para negociar. Esto es un hecho, como lo es el que incluso algunas mujeres que son brillantes cuando negocian para los demás, suelen vacilar al pedir cosas para ellas mismas. Las autoras han investigado el tema en profundidad, y nos explican por qué es fundamental pedir (los hombres lo hacen sin cesar) y cómo pedir eficazmente, de forma tal que te sientas cómoda al hacerlo. Tanto si evitas negociar como si te consideras activa y audaz, las historias de mujeres reales que cuentan Babcock y Laschever te permitirán darte cuenta de que mereces mucho más: un aumento de sueldo, un ascenso, un proyecto apasionante o hasta más colaboración en las tareas propias de una casa.