Resumen

Un coche a toda velocidad, un brazo con un extraño tatuaje azul y el profundo dolor por el rapto de su hijo. Eso es todo lo que recuerda Sibylle cuando despierta en una fría y amenazadora habitación de hospital. Es entonces cuando descubre que lleva dos meses en coma, pero lo más sobrecogedor es que el personal del hospital le indica que, en realidad, ella nunca ha tenido hijo alguno. Sabiéndose de algún modo en peligro, Sibylle consigue escapar y dirigirse a su casa, donde la pesadilla, lejos de desaparecer, se agudiza cuando su marido dice no conocerla. A partir de ese momento, se irá introduciendo en una espiral cada vez más enloquecida, dónde nada es lo que parece, ni siquiera ella misma: policías corruptos, empresas sin escrúpulos y un increíble hallazgo que amenaza la paz mental de Sibylle, quien sólo podrá contar para aclarar lo ocurrido con su maltrecha memoria y un par de desconocidos.

1 Críticas de los lectores

5

Una novela que aunque me resultó muy prometedora al principio me ha defraudado. El autor nos propone una historia que en principio atrapa. El ritmo es ágil, se usan dos voces narrativas, con capítulos cortos, y con constantes giros en el hilo de la historia. Una trama increíble para ser un libro de 10, pero, a mi entender, al autor le ha faltado solidez narrativa. Me ha dado la sensación de que es un libro escrito de forma precipitada, y perdón si no lo es, la historia, los giros argumentales, podían dar mucho más de sí. Algunos personajes no tienen ninguna credibilidad argumental y a otros les falta un empujón. Una novela entretenida que se deja leer pero nada más.

hace 11 años