Todas las familias tienen secretos... La gente tiene una profunda necesidad de secretos. La cuestión es qué hacer con ellos y acerca de ellos, y cuándo contarlos. En el caso de John Lanchester, no fue hasta el fallecimiento de su madre que, inesperadamente, descubrió su verdadera identidad, así como las verdaderas razones que la llevaron a abandonar la orden religiosa a la que había pertenecido. John Lanchester indaga acerca de aquellos aspectos que sus padres quisieron mantener ocultos y lleva a cabo un arduo trabajo detectivesco de gran intensidad emocional: descubrir quiénes fueron verdaderamente sus padres y desentrañar los motivos y las aspiraciones que determinaron sus vidas. Unas emotivas páginas en las que se interroga sobre la esencia de las relaciones familiares al tiempo que realiza una sentida declaración de amor paterno-filial.