No leía cómics desde niño... Este merece, sin duda, la pena y constituye una forma original y distinta de abordar el Holocausto. Increíble la historia de supervivencia del protagonista así como sus manías como secuelas y, como no, recordar que, por cada Vladek Spiegelman, hubo decenas de víctimas que perecieron fruto de esa barbarie.
hace 1 año