No nos dan muchas sorpresas este tipo de historias, sabemos como comienzan y como terminan, sobre todo cuando el protagonista lucha contra viento y marea por sus sentimientos y su deseos sexuales ante una sociedad y sobre todo una familia aferrada a la fe y religión como si no hubiera un mañana. Adam es un adolescente que vive así, sólo ante su familia que no apoya su condición sexual y no sólo eso sino que le ponen condiciones y dudan de sus actos anteponiendo su homesexualidad como si de una enfermedad mental se tratara. Pero no está completamente sólo porque tiene a su mejor amiga que le quiere con locura y condicionalmente y por supuesto tiene a su ¿novio? porque eso es especialmente lo que nos cuenta esta historia. Las idas y venidas de Adam ante el amor, ante chicos que han pasado por su vida y no logra olvidar ante otros que vienen y no le dejan pasar página. Es una historia con sentimiento y muy real, nuestro protagonista siente con el alma y todo su ser ese mundo que a veces se le viene encima y otras le parece que le va grande...pero no, no sucumbe ante el abismo y sale más fuerte que nunca de él. Lo recomiendo para fans de historias con corazón y desnudez absoluta, tiene tientes de novela juvenil pero nada superficial, se deja leer y se agradece esa carga de sentimientos tan auténticos.
hace 3 años