James comienza su segundo año en Hogwarts con ilusión, sabiendo que Merlín será el nuevo director y con su hermano y su prima a su lado. Ha aprendido la lección y sabe ahora que él no es su padre y no tiene que demostrarlo a los demás, pero los problemas parecen perseguir a los Potter, y una horrible conspiración se urde entre los muros del colegio, algo que tiene que ver con Salazar Slytherin y una cosa llamada La maldición del Guardián.