Esta es una novela -nueva vuelta de tuerca en el universo literario de Guillermo Arriaga-, repleta de humor y fina ironía con el propósito de transportarnos a una de las épocas más atractivas de la historia contemporánea: la Revolución mexicana. Un abogado perfecciona el famoso invento de la guillotina y pretende vendérselo nada más y nada menos que al mismísimo Pancho Villa, el general insurgente. A Villa, la idea no sólo le parece bien, sino que decide pagarle al abogado de una manera sorprendente: obligándole a alistarse en su ejército como revolucionario. A partir que este hecho, el abogado nos va contando sus peripecias y experiencias con la tropa de Villa y cómo poco a poco se va introduciendo en la lógica de este mundo, al mismo tiempo disparatado, heroico y cruel.