EL SICARIO DEL SACROMONTE

EL SICARIO DEL SACROMONTE MOLINA GARCÍA, JAIME

Portada de EL SICARIO DEL SACROMONTE
Nota media 8 Muy bueno 1 voto 1 críticas

Resumen

La vida de Lucas, un joven residente en un barrio marginal de Granada, da un vuelco al involucrarse en el clan gitano protagonista de un submundo donde predomina el tráfico de sustancias, la delincuencia y los ajustes de cuentas. No solo se enfrentará al lado más oscuro de una sociedad desarraigada, también deberá lidiar con sus propias emociones y con un pasado que, lejos de quedarse atrás, se mantendrá más presente que nunca. Acostumbrado a la soledad elegida, nada hace presagiar que su mundo vaya a tambalearse de manera agonizante y cruel, debido a su decisión de interferir en un violento acontecimiento que le hará replantearse su vida por completo. Todo esto, unido a los repentinos asesinatos que comienzan a cometerse en el barrio, dará lugar a una carrera contrarreloj para salvar su vida y la de las personas que lo rodean. Venganza, traición, celos, poder, coacción… y amor. Lucas descubre la oscura profundidad de un mundo perverso, pero también logra reconocer ciertos sentimientos a los que jamás había prestado atención. Al menos hasta que alguien con una personalidad arrolladora aparece en su vida, llevándolo a límites insospechados.

1 Críticas de los lectores

Impactante nueva novela de Jaime Molina García que saca al lector de la cotidianidad de los thriller convencionales para presentarnos una original propuesta de buenos no tan buenos enfrentándose a malos mucho más malos.

La novela comienza fuerte, con un capo gitano tratando de convencer a un muchacho de que cometa un asesinato. ¿Cómo ha llegado hasta ahí? El muchacho se llama Lucas. Es camarero de un bar de barrio, no aspira a nada más —bastante tiene con eso— porque solo quiere que lo dejen en paz, vivir —sobrevivir más bien— alejado de problemas, alejado de cualquier situación que le pueda llevar a perder el control, que le pueda dar opción a dejar salir parte de la rabia y la ira que a duras penas mantiene bajo control. Pero la vida nunca sale como uno desea y los problemas van a buscarle; problemas nuevos y problemas llegados desde el pasado. Los problemas nuevos los trae Jaime, un gitano que sabe latín, en el sentido literal y en el metafórico, y los problemas viejos vienen de la mano de su padre, Augusto, que sale de la cárcel con una deuda pendiente. Para saldarla no se parará ante nada ni ante nadie.

Cada uno de los siete capítulos comienza con unos pocos párrafos reflexivos, casi filosóficos, que por sí solos ya hacen que merezca la pena leer este libro; sin embargo, no es la única razón para hacerlo: la definición de los personajes, magistralmente perfilados, profundos y sólidos; el ritmo de la acción, pura ebullición; los escenarios nítidos; los diálogos sensatos, equilibrados y coherentes; todo suma en una trama diferente, muy alejada de los convencionalismos.

Es una novela que plantea una denuncia, en la que el autor nos deja ver una parte de la vida que no querríamos, ni por un momento, conocer de cerca. Que nos pone un espejo delante para que reflexionemos sobre nosotros mismos, para que revisemos nuestra conciencia social y nos replanteemos nuestras convicciones sobre la línea que separa el bien del mal. ¿Y si esa línea queda desdibujada por la supervivencia? Y, en un más difícil todavía, ¿y si no es tan sencillo distinguir entre la supervivencia y la venganza?

Jaime Molina García ha escrito una gran novela: visceral, emocionante, trepidante y profunda, en la que cose de un modo soberbio la acción con los sentimientos para llegarnos tan adentro como un navajazo. (Inma Muñoz, 20 de septiembre de 2024)

hace 2 meses