Flanagan conoce a Carlota, una chica de su misma edad, a la salida del metro, y, juntos, deciden hacer un diario sobre sexo y todo lo relacionado con él.
De esta forma, Flanagan, mediante consultas a un médico, búsqueda en Internet, enciclopedias y conversaciones y entrevistas a sus compañeros, redacta un diario muy informativo sobre el tema, sus experiencias con el sexo y también la relación que va surgiendo con Carlota... todo ello desde el punto de vista masculino.
En este libro, como en todos los anteriores de Flanagan, el protagonista hace uso de sus dotes de detective para averiguar una pequeña curiosidad...