Effy Sayre siempre ha creído en los cuentos de hadas. No le ha quedado más remedio, ya que, desde niña, la persiguen visiones del rey de las hadas. Ha hallado consuelo en las páginas de Angharad, la apreciada novela de Emrys Myrddin, que trata sobre una chica mortal que se enamora del rey de las hadas y luego lo destruye. El ejemplar desgastado de Effy es lo único que la mantiene a flote durante su primer trimestre en la prestigiosa Facultad de Arquitectura de Llyr. Cuando la familia de Myrddin anuncia un concurso para rediseñar la casa del fallecido autor, Effy está segura de que el destino llama a su puerta. Pero es una tarea imposible: la mansión Hiraeth es una casa mohosa y decrépita a punto de derrumbarse en el hambriento mar. Y cuando Effy llega, ya hay otra persona alojándose temporalmente allí: Preston Héloury, un aburrido estudiante de literatura que está decidido a demostrar que el escritor favorito de Effy es un fraude. Mientras los dos rivales investigan el legado del solitario autor y reúnen todas las pistas a través de sus cartas, libros y diarios, descubrirán que hay más cosas de las que no pueden fiarse, aparte de los cimientos de la casa. Existen fuerzas oscuras, tanto mortales como mágicas, que conspiran contra ellos... y puede que la verdad los arruine a los dos.