Son los dueños del espacio y del tiempo. Sigilosos e implacables, los Voladores recorren la Tierra y la historia para cumplir un único objetivo: saciar su sed de sangre. El científico Joe Bodenland es el único que puede detenerlos, pero para hacerlo precisa ayuda. Su aliado se encuentra siglos atrás, en la Inglaterra victoriana: un escritor irlandés atormentado por el sexo y la muerte. Su nombre es Bram Stoker y todavía no ha escrito una novela que le hará famoso, Drácula. En esta secuela de Frankenstein desencadenado, Aldiss nos ofrece una delirante y deliciosa combinación de ciencia ficción y fantasía gótica.