El 6 de junio de 1945 comenzó una nueva era para la humanidad: fue el día en que los Estados Unidos arrojaron sobre la ciudad japonesa de Hiroshima la primera bomba atómica. Se calcula que unas 70.000 personas fallecieron al instante y otras tantas a lo largo del primer año, como consecuencia de la radiación. Toyofumi Ogura estaba allí, lo vio todo y sobrevivió para contarlo. Un año después de los hechos, Ogura escribe una serie de cartas estremecedoras a su esposa muerta para contarle lo que había ocurrido en todo ese tiempo aciago y terrible.