Hemos nacido para amar en cualquier etapa de nuestra vida. Queremos amor del bueno, y sufrimos cuando no resulta de la calidad que esperábamos. Amar es una conducta que hay que aprender, enseñar y practicar. Emociones como el miedo o la ira pueden acabar con una bonita relación. La comunicación o el sentido del humor deben estar presentes para no caer en el abismo del aburrimiento. Analizaremos lo aprendido en nuestras familias e integraremos constructivamente algunos obstáculos, como las familias políticas o las posibles ex parejas.