TRAZOS EN FALSO

TRAZOS EN FALSO TORTOSA, JAVIER

Portada de TRAZOS EN FALSO
Nota media 6 Bueno 1 voto 1 críticas
  • Género Narrativa
  • Editorial BORIA
  • Año de edición 2017
  • ISBN 9788494606519
  • Idioma Español

Resumen

Albert Lea, Minnesota. El verano golpea de lleno. Los días se dilatan. El asfalto cobra vida. Las noches pierden fuelle. Otro curso languidece. Nada es nuevo. La casa de los Townshend aguarda la llegada de tío Fred. En balde. Un percance inesperado propicia el cambio de planes. Nuevo rumbo estival, la costa este. Y hasta que llega el momento, las imágenes se agolpan en el retrovisor.Harvey Townshend se siente en un punto intermedio. En mitad del camino. Sin señales indicadoras. A la entrada de una curva. Cerrada. Con escasa visibilidad. Peralte cambiado. Y final incierto. Necesita hacerse a un lado. Recuperar escenas. Atar cabos. Cobrar constancia. La suya es una historia reversible. Logró salir del pueblo, conoció alternativas, tuvo en su mano cortar amarras. Pero escogió el camino de vuelta. Al cajón de salida. A casa. Como él mismo dice, a su jodido lugar en el mundo.En cierto modo, todos hemos nacido en Albert Lea. En algún pueblo remoto. En unas coordenadas imposibles de ubicar. Todos nos hemos enfrentado a situaciones sin estar preparados. A hechos inexplicables. A encrucijadas. Todos hemos sentido miedo. Todos hemos huido. Todos hemos tomado algún atajo. Todos nos hemos perdido.Trazos en falso es un parte de sucesos. Una roca hecha pedazos. Un puñado de historias. Independientes. Conectadas. Minúsculas. Extraordinarias. Corrientes. Especiales. Antiguas. Actuales. Definitivas. Inconclusas. Historias de gente normal. Que vive en un pueblo normal. Que tiene sueños normales. Que se comporta de forma normal. O no.

1 Críticas de los lectores

6

Libro de relatos que también se podría considerar como un conjunto, pues los personajes van y vienen de uno a otro, y la mayoría están ambientados en Albert Lea, un pueblo de Minessota que parece abandonado de la mano de Dios. Buena parte de ellos están protagonizados y narrados por Harvey Townshend, un aspirante a escritor en la cuarentena que vuelve al pueblo, que es donde tiene sus raíces. Abundan los diálogos y las copas en el bar, los momentos y las casualidades, y sobre todo los personajes, dispares, solitarios, desengañados, perdedores, o simplemente el niño asustado que se sienta junto a Chinaski (sí, el álter ego de Bukoswki) en un hipódromo.
La música está presente y sirve además de introducción a cada uno de los diecisiete relatos, con versos de alguna canción, que en mi caso he buscado y he disfrutado escuchando.
Destacaría el estilo del autor, el uso de frases cortas en mi opinión da precisión y fuerza al texto. Como excepción notable las interminables frases del Harvey de seis años en “Shakopee”.
La mayoría de las historias me han gustado mucho, por citar algunas: “A la de tres”, “Inescrutables”, “Lloviendo balas”, “Una cortina de gafas oscuras”, “Cuento de Navidad”, “Shakopee”, “Ni modo”, “Doscientos pavos”, “El mundo a cámara lenta”, “Mardou”... A pesar de transmitir cierta melancolía, son historias de gente corriente que sigue o busca su destino, y que reflexionan y se plantean las mismas cuestiones que la mayoría de seres humanos.

hace 7 años