A finales de 1492, tras la conquista de Granada y de recibir a Cristóbal Colón a su regreso de América, el rey Fernando sufre un violento atentado en Barcelona que está a punto de acabar con su vida. Aunque enseguida se detiene al presunto culpable, un pobre loco que parece haber actuado solo, la corte es un hervidero de intrigas y en los reinos peninsulares son muchos, muchísimos, los súbditos que se sienten agraviados por las decisiones de sus católicas majestades. Entre ellos, tres mujeres muy distintas con motivos más que suficientes para querer matar al rey.