El estudiante de leyes Fernando de Rojas encuentra un manuscrito anónimo que contiene el primer acto de una comedia sublime. Su interés por localizar al autor lleva al estudiante a un mundo amenazador en el que se mezclan la literatura y el amor, las dos grandes pasiones que envuelven el argumento de Melibea no quiere ser mujer. En esta novela se reconstruye el ambiente social, político y literario en que se escribió La Celestina: asesinato, inquisición, magia, amor, y en el centro, la literatura misma. Melibea, Calisto, Celestina, tan reales como el propio Fernando de Rojas debió de conocerlos, se asoman a estas páginas que nos descubren una Melibea distinta de la que conocíamos.