Comienza la historia central de la saga de Geralt de Rivia, aunque lo hace con un libro algo deshilachado entre sus diversas tramas, de lectura algo tediosa y desnortada, y sin una "entidad propia": la historia realmente no acaba, o podría haberlo hecho en cualquier punto. Contribuye a esta sensación el que varios capítulos comiencen muy "in media res" dando un gran salto con respecto a cómo terminó el capítulo anterior. Con todo, se nos presentan nuevos y estupendos personajes, como Triss, Vesemir o el agente de inteligencia de Redania; además de profundizar en temas como la discordia entre las diversas razas y las relaciones entre personajes, destacando la compleja y rica relación que se crea entre Ciri y Yennefer.
hace 4 años