Comienzo mi critica diciendo que me gusta mucho más las anteriores por el hecho de que son menos ficticias y Cato y Macro están en las legiones, a pesar de esto, la novela me parece original y diferente a las demás, me ha gustado descubrir la piratería en el siglo I d.C, me parece original la idea de los rollos y el tener que recuperarlos, aunque como he dicho antes es más ficticia la novela que histórica. Igualmente me parece original, usa lenguaje náutico preciso y adecuado, aprendes sobre la infantería náutica y por todo esto me ha convencido y gustado.

Es la primera novela que leo de la saga y me ha entretenido bastante, a pesar de que algunas escenas de batallas me han aburrido un tanto. Merece buena nota y estoy segura de que leeré algún aventura más de estos dos centuriones romanos.

Uno de los puntos más flojos de la novela es lo inverosímil que resulta la excusa de que se vale el autor para meter a los protagonistas en esta nueva aventura: se les da a elegir entre una ejecución inmediata o aceptar una peligrosa misión y quedar en completa libertad para incorporarse a su nuevo destino...El autor podía haber servido la nueva aventura de la pareja de centuriones de forma más creíble y no intentar crear momentos de tensión tan artificiosos. Evidentemente, nuestros protagonistas aceptaran la misión que les llevará al mar Adriático en la búsqueda de unos misteriosos rollos de pergamino que parecen tener una gran importancia para el Emperador Claudio y, sobre todo, para su secretario Narciso, y de los que se han apoderado unos piratas en el prologo de la novela que, como siempre en esta serie, tiene la virtud de captar inmediatamente el interés del lector. Así pues, nos encontramos ante una aventura principalmente marítima con los personajes sirviendo en la armada romana en su lucha contra los piratas y mucha acción de guerra naval. Entre medias, una historia un tanto folletinesca (o de culebrón, como se suele decir ahora) con Macro de protagonista, un misterioso espía y un toque "místico" con los inquietantes pergaminos. Por supuesto, el futuro emperador Vespasiano, hará su aparición una vez más en esta novela dirigiendo a los protagonistas. Puro entretenimiento que se sigue con interés pero que adolece de algunos defectos que, por lo menos yo, no he encontrado hasta ahora en las novelas de la serie, como son lo poco convincente de algunas situaciones, como la mencionada, y una sensación de dejá vu en otros momentos en los que parece que el autor se repite...Teniendo en cuenta que esta es la sexta novela, esto último puede parecer algo inevitable y perdonable (aunque a medida que avance la serie puede acentuarse mucho más y ser realmente un problema...) pero lo de la falta de credibilidad en varios momentos es algo más irritante y preocupante. Al margen de sus defectos y que esté por debajo de otros títulos de la serie, esta es después de todo una novela entretenida, variada en su argumento y bastante disfrutable. Esperemos que en futuras entregas remonte un poco este pequeño bache.

Continua de manera exitosa con la serie de CATO. Ahora se ubica en el mar como area de batalla para el imperio romano. Vale la pena leerlo, siempre y cuando se hayan leido los libros anteriores