Si buscas una obra con una narrativa fluida y que sea capaz de transmitirte todos los sentimientos de su protagonista, La mala costumbre es tu libro. Es increíble como Alana es capaz de hacer vivir en tus carnes lo que se siente al vivir atrapada, al disociarte de ti misma hasta el punto de no reconocerte y vivir en una niebla de dolor. El contexto histórico de la obra no sobra, la enriquece y le da un gran realismo, me sentí realmente transportada al Madrid de los años 80, algo muy importante para comprender todo lo que ocurre. Me han encantado las pequeñas historias que se entrelazan con la de nuestra protagonista, que la construyen como un puzle y le dan alas para que avance, a pesar de tener el mundo en contra. Es una obra que te rompe el corazón y te desagarra al ver todo el dolor de sus protagonistas, pero que termina con un tono esperanzador y te permite sonreír a pesar de todo. Destaco mucho la narración de Alana, me ha sorprendido muchísimo. La lectura es muy fluida, a ratos rimbombante, pero con un tono intencionado y que te genera una sensación de urgencia. Por ello es un libro que se devora, en el que cada vez que terminas un capítulo quieres continuar con el siguiente. Estoy deseando leer lo siguiente de esta autora, porque creo que puede convertirse en una de mis autoras nacionales favoritas. Un libro que te hará llorar, reír, sentir. Una obra que te llega al alma, te la retuerce y que, al final, es capaz de dejarte el corazón calentito. Una historia que merece ser contada y, sobre todo, escuchada. Irbis.

Un libro efectivo, bien escrito, original, con un enfoque contundente y, al mismo tiempo, sereno de una cuestión que, evidentemente, dista mucho de estar normalizada. Se requieren más libros de este estilo para comprender el sufrimiento de un colectivo ante el desprecio y la crueldad de la sociedad, que sólo se pueden superar mediante pedagogía. Más allá de estas consideraciones, la novela es ágil y amena. Recomendable!

La protagonista de esta novela se da cuenta muy pronto de que su cuerpo no se corresponde con su identidad. Vive avergonzada y asustada en medio de un mundo que no es tolerante con los que son diferentes a la mayoría. Rechaza su cuerpo de varón como algo ajeno, sus referentes son otras mujeres pero no sabe cómo contar lo que le pasa, ni a quién confiarse porque ella no se siente homosexual, ella se siente mujer y en sus relaciones el único consuelo es ser tratada como gay pero ésta tampoco es su identidad. Esta novela habla con respeto, delicadeza y cariño del derecho de todas las personas a sentir, a querer y a ser. Denuncia la intolerancia y la maldad de quienes condenan este derecho. Es una novela llena de humanidad, con un lenguaje cuidado nos acerca a unos personajes muy reales, no escatima detalles ante la crudeza de algunos hechos y es absolutamente bello en la dignificación de los personajes maltratados. Sin duda recomendable.

MUY recomendable

Maravilloso y necesario. Escritura impecable, fácil de leer, llena de referencias y metáforas geniales. Se devora y gusta, gusta mucho. Toca en lo más hondo del alma y es capaz de hacer un poquito mejor y mucho bien a cualquier persona. Bravo por Alana.

La historia de una chica trans nacida en barrio obrero de Madrid hasta su edad adulta. Con pocas páginas te transporta su casa, a su barrio, a Chueca y aledaños, a la cabeza y el corazón de la protagonista. Yo no le veo pegas. He leído otros libros con historias similares y sin duda este es el que más me gusta y es porque aporta la visión de clase y no solo la disputa de la identidad de género.

Me ha gustado la trama y la forma de escribir. Me ha servido para entender mejor muchas cosas y recomiendo este libro para que todo lo que se ha adelantado en libertad, y géneros diferentes, no vuelva hacia atrás. Libro ameno, triste y maravillosos.

Hacía tiempo que un libro no me enganchaba tanto. Un barrio tan parecido al mío a pesar de ser en ciudades tan diferentes. Un libro sobre la identidad y lo difícil que es a veces mostrarla. El buscar y encontrar personas con las que te identificas y poder ser tu mismo aunque solo sea por unas horas. Y esos monstruos acechando, esperando que des un mal paso para anularte.

MUY recomendable <3

Qué barbaridad de libro, me ha fascinado, que crueldad de las personas,también tengo que decir. Aquí tenemos un personaje lleno de miedo, que está atrapado en un cuerpo que no ama, que no quiere, que lucha con sus dragones para sobrevivir en las calles de Madrid de los años 80, donde la droga y el Sida estaban a la orden del día. Imagine, un maricon, una lesbiana, una bollera y travesti en aquellos tiempos, donde entraba la democracia en una España que había sufrido una dictadura, que las personas homosexuales eran bichos enfermos. Pasando las páginas tenemos a varios personajes, mi queridísima Margarita, que la amé tanto. Jay el primer amor, la bruja peluca, que me reí en su momento. Eugenia, a los padres de la cuál tanto admiré porque ellos, sin decir nada, sabían perfectamente que su hijo estaba atrapado en un cuerpo que él no quería, sin olvidar a su hermano, que lo protegió en todo momento. Este libro es una reflexión, es una filosofía de la vida, donde los transexuales tienen que pasar de todo, insultos, humillaciones, y hasta peleas que les cuestan la vida. Me he quedado con el corazón en mil pedazos en el último capítulo, pero Alana supo cómo escribir un brillante libro.