Hace muchos años que no leía una novela histórica, y menos una de Martínez de Lezea. De fácil lectura y enfocada al entretemiento, lo que mas me gusta de la presente es la ambientación en su tiempo político e histórico concreto: la Navarra recientemente conquistada y ocupada por los extranjeros, así como "la caza de brujas", mas como tapadera de una persecución religiosa y política (siglo XVI). Partiendo de un personaje real, el licenciado Pedro de Balanza y de otro que probablemente existió, el juez Avellaneda, del que solo se sabe su nombre, la autora teje una entretenida historia en la que presenta al primero como un arribista que sirve al poder de turno y se muestra excéptico con la existencia de la brujería aunque la persigue, y al segundo como un "fanático de manual", además de drogadicto que sí cree en las brujas. Por otro lado están los personajes de ficción, entre los que se encuentran los "buenos" de la novela, quizás excesivamente pintados como "bondadosos". Los mas importantes serían Loredi y su padre y todos los que sufren la persecución. Se respeta la cronología histórica al recrear las tres razias "cazabrujas" que asolaron en el siglo XVI estos valles del Pirineo Navarro, en un país recientemente conquistado y en periodo de persecución política.
hace 9 meses