Sin duda, lo mejor de este libro es cómo está narrado y, sobretodo, los toques de humor que le da el protagonista-narrador.
hace 8 años
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Sobró razón a don Esteban de Montserrat al ocultar su indiscreto y veraz manuscrito, emparedándolo en el vano de un muro. Que no eran tiempos los de año 1561 para que divulgasen secretos de Inquisición aquellos a quienes les estaban encomendados. Pues sepa el lector que rubrica el legajo que obra en sus manos el escribano del secreto en el Oficio de la Santa Inquisición.
Sin duda, lo mejor de este libro es cómo está narrado y, sobretodo, los toques de humor que le da el protagonista-narrador.
hace 8 años